Si necesitas oxígeno en casa, es importante aprender a usar y cuidar tu equipo. Aquí te dejamos alguna información que te ayudará a aprovechar al máximo tu tratamiento.

Recuerda que:

  • Si tienes niveles bajos de oxígeno en la sangre, respirar oxígeno adicional puede ayudar a que te sientas mejor y llevar una vida más larga y activa.
  • Puedes viajar aunque uses oxígeno, pero deberás planificar con anticipación.
  • El oxígeno es un peligro de incendio. Sigue las medidas de seguridad para que tú y tu familia se mantengan seguros y a salvo.

Conoce más: Beneficios de la terapia de oxígeno

Cómo usar la oxigenoterapia en el hogar

Después de que tu médico te recete oxígeno y decidas qué fuente utilizarás, hay algunas cosas que debes saber sobre el uso de oxígeno en el hogar.

Instrucciones básicas

No cambies la configuración de tu oxígeno sin hablar primero con tu médico. Subir o bajar el flujo podría ponerte en peligro.

Mantén un registro de cuánto oxígeno hay en el tanque y ordena más por adelantado para que no se te acabe.

No bebas alcohol ni tomes fármacos que te relajen, como pastillas para dormir o sedantes, mientras usas oxígeno. Pueden hacer que respires muy lentamente.

Llama a tu médico si sientes:

  • Falta de aliento.
  • Inquietud o confusión.
  • Mucho cansancio.
  • Como si no estuvieras recibiendo suficiente oxígeno.

 

Fuente: Michigan Medicine – University of Michigan Health