A medida que las personas envejecen, se vuelven más propensas a desarrollar diferentes tipos de problemas de salud. Un desafío que probablemente enfrentarán los adultos mayores en particular es vivir con múltiples problemas de salud. Más de la mitad de todos los adultos mayores de 65 años tienen tres o más problemas médicos continuos, como enfermedades cardíacas, diabetes, cáncer o artritis. Averiguar el mejor curso de tratamiento para tales problemas puede ser complicado. Por ejemplo, recetar medicamentos para un paciente de este tipo es más complicado que cuando el paciente tiene solamente un problema de salud, porque un medicamento que puede ser útil para tratar un problema puede empeorar otro. Por ello, tanto los pacientes como los proveedores de atención médica tienen un papel que desempeñar para hallar la mejor solución a estas problemáticas.
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Debes trabajar con tu médico de cabecera para comprender todas tus opciones de atención y desempeñar un papel activo al decidir qué tipo de atención te gustaría recibir. Por ejemplo, debes pedirle a tu doctor que te diga cuánto tiempo puede tardar en funcionar cada opción de tratamiento, ya que algunos tratamientos pueden tardar más que otros en mostrar sus beneficios.
Asimismo, tendrás que decidir si deseas tomar todas tus decisiones de atención por tu cuenta o incluir a otros en el proceso de toma de decisiones. Estos pueden incluir cónyuges, familiares o amigos. Y siempre debes informar a tus proveedores de atención médica de inmediato si tienes preguntas o inquietudes, si deseas interrumpir el tratamiento o si quieres probar algo nuevo.
Fuente: AGS Health in Aging Foundation
