La sudoración y el olor corporal son comunes al hacer ejercicio o al sentir demasiado calor. También son comunes cuando estás nervioso, ansioso o estresado, a decir de Mayo Clinic.
Los cambios inusuales en la sudoración, ya sea demasiada transpiración —hiperhidrosis— o muy poca transpiración —anhidrosis—, pueden ser motivo de preocupación. Los cambios en el olor corporal también pueden indicar un problema de salud.
Es importante aclarar que algunas personas sudan más o menos que otras. El olor corporal también puede variar según la persona. Sin embargo, te recomendamos consultar a tu médico si:
- Comienzas a sudar mucho más o menos de lo habitual.
- La sudoración perturba tu rutina diaria.
- Tienes sudoraciones nocturnas sin razón aparente.
- Notas un cambio en tu olor corporal.
La sudoración y el olor corporal son causados por las glándulas sudoríparas del cuerpo. Los dos tipos principales de glándulas sudoríparas son las glándulas ecrinas y las glándulas apocrinas.
Las glándulas ecrinas se encuentran en la mayor parte del cuerpo y se abren directamente sobre la superficie de la piel. Cuando la temperatura corporal aumenta, estas glándulas liberan líquidos que refrescan el cuerpo a medida que se evaporan.
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Las glándulas apocrinas se encuentran en áreas donde tienes vello, como las axilas y la ingle. Estas glándulas liberan un líquido lechoso cuando estás estresado. Este líquido es inodoro hasta que se combina con las bacterias de la piel.
Toma en cuenta que ciertos cambios en el estilo de vida pueden ayudar a controlar la sudoración y el olor corporal. Evita tomar medicamentos o recibir tratamientos antes de visitar a un profesional de la salud.
Si tienes dudas respecto a tu sudoración u olor, buscar asesoría.
Fuente: Mayo Clinic
