El síndrome de vómitos cíclicos es una afección poco frecuente que provoca episodios graves de náuseas y vómitos. Evitar las cosas que lo desencadenan y tomar medicamentos puede ayudar a controlar los síntomas.
Los principales síntomas del síndrome de vómitos cíclicos son episodios graves de náuseas y vómitos, seguidos de períodos de bienestar.
Cada episodio puede durar desde unas horas hasta unos días.
Comienzan con sudoración, náuseas y palidez, seguidos de arcadas (intentar vomitar) y vómitos.
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Otros síntomas del síndrome de vómitos cíclicos pueden incluir:
- Cansancio intenso (agotamiento)
- Pérdida de apetito
- Dolor de estómago
- Diarrea
- Mareos
- Dolores de cabeza
- Dolor ocular al mirar luces brillantes
Los episodios suelen comenzar a la misma hora del día o de la noche y duran el mismo tiempo. Una vez que estos síntomas mejoran, la mayoría de las personas con síndrome de vómitos cíclicos se sienten mejor durante unas semanas o meses hasta que comienza un nuevo episodio.
El síndrome suele comenzar en niños de alrededor de 5 años y mejora a medida que crecen. Pero también puede afectar a adultos y suele ser más grave en aquellos que no padecieron la afección durante la infancia.
Fuente: NHS