El dolor pélvico puede ser un malestar constante o aparecer y desaparecer. También puede presentarse como un dolor intenso y punzante en un lugar específico, o una molestia tenue en un área amplia de la pelvis.

Este tipo de dolor es muy común en las mujeres durante el período menstrual. Asimismo, puede ser un signo de que existe un problema con uno de los órganos de la región pélvica, como el útero, los ovarios, las trompas de Falopio, el cuello uterino o la vagina. En el caso de los hombres, puede deberse a un problema de la próstata.

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Otras causas

En hombres y mujeres, podría ser un síntoma de infección o de problemas en las vías urinarias, el intestino, el recto, los músculos o los huesos. De hecho, algunas mujeres pueden presentar más de una causa de dolor pélvico al mismo tiempo.

¿Cómo se diagnostica el dolor pélvico?

Para determinar la causa del dolor, un médico hará lo siguiente.

  • Preguntar sobre el dolor y la historia clínica. La forma en que una persona describe su dolor puede ayudar al profesional de la salud a determinar de qué tipo de dolor se trata y cuál podría ser la causa.
  • Realizar un examen físico. El médico examinará el abdomen, la pelvis, los órganos, los músculos y los tejidos en la región pélvica para detectar cualquier sensibilidad excesiva al contacto u otras anormalidades que sugieran un trastorno del dolor.

La información que el médico obtenga a partir de las preguntas y el examen físico le ayudará a decidir si es necesario realizar pruebas o procedimientos adicionales para ayudar a diagnosticar la causa del dolor. Recuerda que ningún dolor es normal. Ante cualquier malestar, comunícate con tu médico de cabecera.

 

Fuente: Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos