El objetivo principal del tratamiento para el dolor crónico es reducir el dolor y aumentar la movilidad. Esto permite que la persona regrese a sus actividades diarias sin molestias.

La gravedad y la frecuencia del dolor crónico pueden diferir entre individuos. Por ello, los médicos crean planes de manejo del dolor que son específicos para cada persona. Tu plan de manejo del dolor dependerá de tus síntomas y de cualquier condición de salud subyacente. Se pueden usar tratamientos médicos, remedios de estilo de vida o una combinación de ambos métodos para tratar tu dolor crónico.

Medicamentos

Existen varios tipos de medicamentos disponibles que pueden ayudar a tratar el dolor crónico. A continuación te mencionamos algunos ejemplos:

  • Analgésicos de venta libre, como paracetamol o medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) como la aspirina o el ibuprofeno.
  • Analgésicos opioides, como morfina, codeína e hidrocodona.
  • Analgésicos adyuvantes, como antidepresivos y anticonvulsivos.

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Procedimientos médicos

Ciertos procedimientos médicos también pueden aliviar el dolor crónico. Ejemplos de ellos incluyen los siguientes:

  • Estimulación eléctrica, que reduce el dolor al enviar descargas eléctricas leves a los músculos.
  • Bloqueo nervioso, que es una inyección que evita que los nervios envíen señales de dolor al cerebro.
  • Acupuntura, que consiste en pinchar ligeramente la piel con agujas para aliviar el dolor.
  • Cirugía, que corrige las lesiones que pueden haberse curado incorrectamente y que pueden estar contribuyendo al dolor.

Remedios de estilo de vida

Sumado a lo anterior, existen varios remedios de estilo de vida disponibles para ayudar a aliviar el dolor crónico. Ejemplos de estos incluyen:

  • Terapia física
  • Tai Chi
  • Yoga
  • Arte y musicoterapia
  • Terapia para mascotas
  • Psicoterapia
  • Masaje
  • Meditación

 

Fuente: Healthline