Una biopsia de ganglio linfático extrae tejido de los ganglios linfáticos para examinarlo con un microscopio en busca de signos de infección o una enfermedad, como el cáncer, así lo indica Michigan Medicine, en Estados Unidos.

También se pueden usar otras pruebas para verificar la muestra de tejido linfático, incluyendo un cultivo, pruebas genéticas o pruebas para estudiar el sistema inmunológico del cuerpo (pruebas inmunológicas).

Los ganglios linfáticos son parte del sistema inmunológico. Se encuentran en el cuello, detrás de las orejas, en las axilas, en el pecho, en el vientre y en la ingle.

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Los ganglios linfáticos en personas sanas suelen ser difíciles de palpar. Sin embargo, los que se ubican en el cuello, la axila o la ingle pueden agrandarse y volverse sensibles. Los ganglios linfáticos inflamados generalmente son sinónimo de una infección. Pero la hinchazón también puede ser causada por un corte, un rasguño, una picadura de insecto, un tatuaje, una reacción a un medicamento o un cáncer.

Existen varias formas de realizar una biopsia de ganglio linfático. La muestra del ganglio se examinará con un microscopio para detectar problemas.

  • Biopsia por aspiración con aguja fina. Tu médico inserta una aguja fina en un ganglio linfático y extrae una muestra de células.
  • Biopsia con aguja gruesa. Tu médico inserta una aguja con una punta especial y extrae una muestra de tejido del tamaño de un grano de arroz.
  • Biopsia abierta (quirúrgica). Tu médico hará un pequeño corte en la piel y extirpará un ganglio linfático. Si extrae más de un ganglio, la biopsia se llama disección de ganglio linfático. La biopsia abierta y la disección de los ganglios linfáticos permiten que tu médico tome una muestra más grande que una biopsia con aguja.

Si tienes más dudas sobre la biopsia de ganglio linfático, consulta a tu médico.

 

Fuente: Michigan Medicine – University of Michigan Health