El asma intrínseca y extrínseca son dos subtipos de asma, a los que las personas se refieren más coloquialmente como asma alérgica y no alérgica.
Ambos tipos ocasionan los mismos síntomas. La diferencia entre ambos es lo que causa y desencadena los síntomas del asma. Los tratamientos son similares para cada tipo, aunque las estrategias de prevención difieren.
Desencadenantes
En personas con asma extrínseca, los alérgenos desencadenan síntomas respiratorios. Sus desencadenantes más comunes incluyen los siguientes:
- Polen
- Moho
- Ácaros del polvo
- Caspa de mascotas
En algunos casos, una persona es alérgica a más de una sustancia y varios alérgenos desencadenan síntomas de asma.
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En las personas con asma intrínseca, las alergias no son responsables de los síntomas. En su lugar, los desencadenantes incluyen:
- Frío
- Humedad
- Estrés
- Ejercicio
- Contaminación
- Irritantes en el aire, como el humo
- Infecciones respiratorias, como resfriados, gripe e infecciones de los senos paranasales
En algunos casos, el asma intrínseca puede presentarse sin causa conocida.
Prevalencia
El asma extrínseca o alérgica es la forma más común de la enfermedad. Alrededor del 60-90% de las personas con asma padecen asma alérgica.
El asma intrínseca o no alérgica es menos común y se presenta entre el 10% y el 40% de las personas con asma. Además, es más frecuente en mujeres que en hombres y, generalmente, se desarrolla en etapas posteriores de la vida en comparación con el asma extrínseca.
Fuente: Medical News Today
