De acuerdo con la Clínica Mayo, la alergia a la leche es una respuesta poco común del sistema inmunológico del cuerpo a la leche y los productos que la contienen. Se considera una de las alergias alimentarias más comunes en los niños, siendo la leche de vaca la principal culpable, pero también pueden desencadenarla las leches de oveja, cabra, búfalo y de otros mamíferos.
Evitar la leche y los productos lácteos es el tratamiento principal contra la alergia a la leche. Por fortuna, la mayoría de los niños superan la afección, y aquellos que no lo logran, deben seguir evitando los productos lácteos.
Los síntomas de la alergia a la leche difieren de una persona a otra, y duran de unos minutos a unas horas después de que el/la menor bebe leche o come productos lácteos.
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A continuación te mencionamos los signos y síntomas inmediatos de la alergia a la leche:
- Urticaria
- Sibilancias
- Sensación de picazón u hormigueo alrededor de los labios o la boca
- Hinchazón de los labios, la lengua o la garganta
- Tos o dificultad para respirar
- Vómitos
Los signos y síntomas que pueden tardar más tiempo en desarrollarse incluyen:
- Heces blandas o diarrea, que pueden contener sangre
- Calambres abdominales
- Nariz que moquea
- Ojos llorosos
- Cólicos en los bebés
Si deseas saber más sobre la alergia a la leche en niños, consulta a tu médico.
Fuente: Mayo Clinic
