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naranjasLa Secretaría de Salud (Ssa), a través de un comunicado, informa a la población que en esta temporada de frío una de las maneras más fáciles de reforzar nuestro sistema autoinmune es el consumo diario de dos a cuatro frutas o verduras con alto contenido de vitamina C. Esto, ayuda a proteger a nuestro cuerpo ante infecciones respiratorias.

Alejandra Oropeza, Coordinadora de la Clínica de Obesidad y Síndrome Metabólico del Hospital General de México “Eduardo Liceaga”, explica que esta vitamina se elimina rápidamente del cuerpo a través de la orina. Por ello, dijo, es necesario ingerir diariamente una dosis adecuada de ésta En este sentido, apunta, que las frutas con un mayor contenido de vitamina C son la guayaba, lima, naranja, mandarina y tejocote. Las cuales son fáciles de encontrar en esta temporada y tienen un bajo costo.

Otra opción para contrarrestar los cuadros gripales, señala la especialista, son las verduras como el brócoli, chile morrón, col, coliflor, espinaca y jitomate. Estas verduras, además de ser ricas en vitamina C, también poseen propiedades antioxidantes.

La doctora Oropeza explica que las frutas y las verduras son la única fuente de esta vitamina en la dieta. También agrega que pueden aportar ácido fólico, carotenos, vitamina K y minerales como potasio y hierro. Se recomienda comer estos alimentos crudos y con cáscara, para poder aprovechar su fibra dietética.

Si se tienen problemas para lograr que los menores consuman este tipo de alimentos, se puede acudir al médico para que éste prescriba algún tipo de complemento de esta vitamina y mantener el consumo recomendado.

Sobre el consumo de jugos, la nutrióloga explica que solamente se recomienda si se van a consumir de manera inmediata, pues de lo contrario pierden su contenido vitamínico. “Un jugo de naranja debe tomarse en el momento de realizarlo, si dejamos pasar el tiempo pierde todas sus propiedades y se convierte sólo en una bebida azucarada”, dijo.

Agregó que para que el organismo funciones en toda su capacidad, es necesario llevar una dieta balanceada que incluya verduras, frutas, cereales, tubérculos, leguminosas y alimentos de origen animal.

Vía: Secretaría de Salud