Entre las personas que realizan ejercicio de forma frecuente por las mañanas, pero especialmente entre aquellas que recién comienzan a adoptar un ritmo de vida activo, suele existir una gran duda: ¿cuáles son los mejores alimentos para desayunar antes de hacer ejercicio?

La importancia del desayuno

Aunque desde hace tiempo existe cierta polémica sobre si es mejor desayunar antes o después de hacer ejercicio, las evidencias son claras: la alimentación es vital para la actividad física y la salud integral en general, además, el desayuno es la comida más importante del día.

Es vital e imprescindible ingerir algo de comer antes de hacer ejercicio. Cuando te levantas es necesario ingerir algo para que el organismo pueda funcionar correctamente y llevar a cabo el trabajo muscular”, indicó Daniel Escaño, nutricionista deportivo especializado en alto rendimiento.

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“Si no tienes gasolina en el músculo -glucógeno- es muy difícil que puedas hacer ejercicios. Y si los haces, no los terminarás realizando de la manera más adecuada ya que no tendrás la suficiente energía y sus beneficios no se notarán”, aseguró.

¿Cuál es la mejor opción?

De acuerdo con el experto, “el cuerpo necesita de suficiente energía para poder funcionar, como el combustible que necesita el motor de un auto, pero después hay que ver qué tipo es el más recomendado”. Por lo que recomendó priorizar calidad antes que cantidad.

Antes de una rutina de ejercicio matutina, lo ideal es tomar un desayuno principalmente compuesto por carbohidratos, apuntó Nancy Cohen, profesora en el departamento de nutrición de la Universidad de Massachusetts, Estados Unidos. Algunas opciones saludables son:

-Arroz

-Pasta

-Cereal

-Frutas

Asimismo, se debe evitar el consumo de alimentos grasosos o muy cargados de fibra, aconsejó la experta.

En personas que no tengan hambre por las mañanas, lo ideal es tomar una pequeña ingesta de alimento unos 30 minutos antes de la actividad física con alimentos que no sean difíciles de digerir.

“Una pieza de fruta como un plátano, o un lácteo desnatado, siempre que no sean muy grasos. También puede ser un pan tostado o una barra de cereales”, compartió Escaño. Lo importante es no realizar ejercicio con el estómago vacío. En estos casos, después del entrenamiento se debe consumir un desayuno más completo con alimentos que ayuden al cuerpo a su recuperación.

 

Vía: BBC