Las várices son un padecimiento venoso en donde las paredes de los vasos sanguíneos se dañan, y que además suele ser visible en las piernas, así lo señala Elvia Calvillo Tinoco, médico familiar de la Unidad de Medicina Familiar número 13 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Querétaro.

Mencionó que la afección dilata e inflama las venas, produciendo alteraciones en las paredes de los vasos sanguíneos, lo que a su vez daña su elasticidad y obstruye el flujo sanguíneo. No obstante, pueden ser tratadas mediante cirugía para hacerlas desaparecer.

La experta recordó que algunos de sus síntomas característicos incluyen:

  • Abultamiento que se eleva a la parte superior de la piel, de forma que limita su capacidad para mantenerse firme.
  • Dolor intenso de piernas.
  • Pesadez al caminar.
  • Calambres nocturnos.
  • Ardor.
  • Manchas de color ocre en la piel (en los casos más graves).

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Cabe destacar que si no se recibe tratamiento ante los primeros síntomas, pueden aparecer úlceras varicosas que generan más molestia e incrementan la posibilidad de sufrir incapacidad para concretar las actividades cotidianas, pues cuando se manifiestan impiden caminar.

Personas más susceptibles

Con base en lo anterior, Calvillo Tinoco resaltó que la población que es más susceptible a desarrollar várices incluye:

  • Mujeres de clase trabajadora en edad productiva (pasan largas horas de trabajo en una misma posición).
  • Mujeres que están bajo algún procedimiento hormonal (como las embarazadas o las que reciben tratamiento para la menopausia).
  • Personas con obesidad.
  • Adultos mayores de 60 años.

Aunque no es posible eliminar las várices en su totalidad, se pueden controlar los factores de riesgo que dan lugar al padecimiento. La mejor manera de hacerlo es practicando ejercicio para activar la circulación, tener una alimentación adecuada y bajar de peso, pues así se evita el abultamiento de las venas, aconsejó la especialista, y agregó que es primordial acudir al médico ante los primeros síntomas y venitas en las pantorrillas, a fin de tomar medidas cuando esté iniciando el padecimiento.

 

Vía: Académica