Los temblores en personas son contracciones musculares involuntarias y rítmicas que provocan movimientos agitados o sacudidas en una o más partes del cuerpo.

Se trata de un trastorno del movimiento frecuente que afecta con mayor frecuencia las manos, pero también puede afectar otras partes del cuerpo, como los brazos, la cabeza, las cuerdas vocales, el torso y las piernas.

Los temblores pueden ser constantes o intermitentes -es decir, que ocurren en distintos momentos y con interrupciones-. Estos pueden ocurrir esporádicamente o como resultado de otro trastorno.

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Aunque los temblores suelen ser más comunes en adultos de mediana edad y adultos mayores, estos pueden presentarse en personas de cualquier edad.

Un temblor puede manifestarse de las siguientes maneras:

-Sacudida rítmica de las manos, brazos, piernas o el tronco.

-Voz temblorosa.

-Dificultad para escribir o dibujar.

-Problemas para sostener y controlar utensilios, como la cuchara.

Algunos temblores pueden desencadenarse o empeorar durante momentos de estrés o emoción fuerte, así como tras un extenuante agotamiento físico, o cuando una persona se coloca en ciertas posturas o hace ciertos movimientos.

¿Cuáles son sus causas?

De acuerdo con expertos en salud, la mayoría de los tipos de temblor no tiene causa conocida, aunque hay algunas formas que parecen ser hereditarias.

En algunos casos, los temblores pueden ser síntomas causados por algunos problemas de salud, entre los que se encuentran:

-Esclerosis múltiple.

-Accidente cerebrovascular.

-Lesión traumática cerebral.

-Enfermedades neurodegenerativas que afectan partes del cerebro (como la enfermedad de Parkinson).

También pueden aparecer debido a:

-Uso de ciertos medicamentos para tratar el asma y ciertos trastornos psiquiátricos y neurológicos.

-Alcoholismo o abstinencia del alcohol después de un periodo de consumo excesivo.

-Envenenamiento por mercurio.

-Tiroides hiperactiva.

-Insuficiencia hepática o renal.

-Ansiedad o pánico.

Consideraciones

Aunque aún no hay una cura para la mayoría de los tipos de temblor, sí existen opciones de tratamiento disponibles que ayudan a controlar los síntomas. En algunos casos, los síntomas pueden ser lo suficientemente leves que no requieren tratamiento.

Encontrar un tratamiento adecuado depende de un diagnóstico preciso de la causa, por lo que se debe acudir con un especialista en salud si se presentan temblores con frecuencia. Con ayuda del tratamiento correcto, se puede mejorar o eliminar completamente el temblor causado por problemas de salud.

 

Vía: Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares