Se conoce como conducto lagrimal al conducto que transporta las lágrimas desde la superficie del ojo hasta la nariz. Se podría decir que es el ‘sistema de drenaje’ de lágrimas.

Este conducto puede llegar a obstruirse, ya sea parcial o completamente. Cuando se bloquea, las lágrimas se acumulan y se derraman por las mejillas. Esto ocurre incluso cuando una personas no está llorando.

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Hay que recordar que una persona no solo produce lágrimas cuando está triste. El ojo humano constantemente está produciendo lágrimas para ayudar a proteger su superficie.

¿Cuáles son sus causas?

En el caso de los niños, este conducto puede obstruirse debido a que es posible que aún no esté completamente desarrollado. Puede estar cerrado o cubierto por una delgada película, lo que causa un bloqueo parcial.

Ahora, en el caso de los adultos, el conducto lagrimal puede llegar a obstruirse o resultar dañado debido a causas como una infección, una lesión o un tumor.

¿Cuáles son sus síntomas?

El principal síntoma es el incremento del lagrimeo, el cual incluso ocasiona que las lágrimas se derramen sobre la cara o las mejillas.

Cuando sucede en bebés, este lagrimeo se vuelve notorio durante las primeras dos a tres semanas después del nacimiento.

Algunas veces incluso, puede llegar a parecer que las lágrimas son más espesas, por lo que se pueden secar y formar costra.

Consideraciones

En el caso de los bebés, una obstrucción de este tipo casi siempre desaparece por sí sola antes de que el pequeño cumpla el primer año de vida. De no ser así, existe un procedimiento médico para corregir este problema.

En adultos, el pronóstico varía según la causa y el tiempo transcurrido desde que se produjo la obstrucción.

Se debe acudir con un médico en el caso de que se presente derrame de lágrimas sobre las mejillas. El tratamiento temprano es más eficaz. Y en el caso de que la causa sea un tumor, la detección oportuna puede salvar la vida de la persona.

 

Vía: Medline Plus