Exponerse por largos períodos al sol puede causar dolor, enrojecimiento y descamación de la piel. Y aunque para muchos son síntomas normales, para la Academia Española de Dermatología y Venereología representan quemaduras que aumentan las probabilidades de padecer cáncer y envejecimiento cutáneo.

¿Te has preguntado por qué se descama la piel? Se trata de un mecanismo que pone en marcha nuestra dermis ante la agresión externa que suponen los rayos ultravioleta. Este proceso se debe a la melatonina, que oscurece y protege la piel.

Cuando la capacidad de la piel para producir melatonina es inferior al grado de exposición, la piel se daña y se producen quemaduras de primer o segundo grado. En estos casos, la piel muerta cae y se renueva con el tiempo. Si ya te sucedió algo similar, es importante que actúes con cuidado para reducir los daños. Sigue estos consejos

Recomendaciones

  1. Lleva ropa ligera y holgada que no favorezca la aparición de más traumas en la piel.
  2. No te rasques, por más comezón que tengas. Recuerda que la piel está más sensible y podrías provocar cicatrices.
  3. No retires la piel por tu cuenta, considera que podrías causar una infección e irritarla aún más. Es mejor esperar a que ésta se vaya desprendiendo sola.
  4. Evita frotar con fuerza durante los baños. Las esponjas exfoliantes o cualquier acción que friccione la piel están prohibidas.
  5. Aplica crema hidratante varias veces al día hasta que la piel se haya descamado completamente.

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Para prevenir todo esto, es importante mantener hábitos saludables durante todo el año, como ponerse protector solar a diario; hacer una autoexploración del estado de la piel y acudir al dermatólogo ante la mínima sospecha de daño cutáneo.

Toma en cuenta que la mayoría de las quemaduras solares se curan por sí solas sin complicaciones, pero existen casos en los que será necesario acudir al médico.

 

Vía: 20 minutos.es