Cuidar todos los aspectos que repercuten en la salud integral de los bebés es la mayor preocupación de los padres de familia. Es por ello que recurren algunas veces a productos que prometen una máxima seguridad, aunque lamentablemente pocas veces cumplen su promesa.
Uno de estos productos son los denominados protectores para dormir -también conocidos como ‘nidos’ o respaldos-, los cuales garantizan el bienestar de los bebés mientras duermen de forma segura. Pero, ¿qué opinan los expertos en salud sobre su uso?
No solamente no los recomiendan, sino que exhortan a los padres a no utilizarlos, pues además de no cumplir su promesa, en realidad estos productos son un potencial riesgo para los bebés.
Los pequeños deben ser puestos a dormir de espaldas, en una superficie firme y vacía. Nunca deben colocarse en un posicionador para dormir, indicaron expertos de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés).
Por su parte, la Academia Americana de Pediatría (AAP, por sus siglas en inglés) advirtió a los padres y cuidadores que esos productos pueden hacer que los bebés no puedan respirar, aumentando peligrosamente el riesgo del síndrome de muerte súbita del lactante (o SMSL).
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Esto se debe a que los posicionadores para dormir normalmente incluyen dos almohadas o apoyos levantados y pegados a una alfombrilla. Los niños se colocan en esta alfombrilla, entre las almohadas, para aparentemente mantenerlos en una posición específica mientras duermen. Sin embargo, poner a los bebés a dormir en o cerca de objetos blandos, como los posicionadores, juguetes, almohadas y ropa de cama suelta, aumenta el riesgo de ahogamiento accidental, explicaron.
Padres y cuidadores deben poner siempre a los bebés de espaldas para tomar la siesta y para dormir de noche. Los pequeños nunca deben dormir con un posicionador, almohada, manta, sábanas, un edredón o una colcha, recomendó la FDA.
Asimismo, la superficie en donde los niños duermen debe estar completamente despejada y libre de cualquier artículo suelto. Vestirlos con ropa adecuada los mantendrá suficientemente calientes mientras duermen, por lo que no se necesita un exceso de cobijas o mantas.
De acuerdo con la FDA, cada año cerca de 4 mil bebés fallecen de forma inesperada mientras duermen, debido a la asfixia, el SMSL u otra causa desconocida.
Vía: Health Day News
