La Academia Americana de Pediatría (American Academy of Pediatrics) solicita a los establecimientos educacionales no reducir el tiempo del recreo escolar, ya que  este descanso contribuye a desarrollar un estilo de vida sano.

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Catherine Ramstetter, líder del estudio y miembro del comité de salud del hogar y escolar de la academia, señala que la investigación determina que el recreo es una instancia única para que los estudiantes descansen de las exigencias escolares. Además, constituye un “foro para la expresión creativa, la participación social y la actividad física’’.

También asegura que los menores procesan de mejor forma la información si tienen un descanso entre una actividad compleja y otra.

Por su parte el co-investigador y profesor del departamento de nutrición humana de la Universidad Estatal de Ohio,  Dr. Robert Murray, agregó que esta pausa es fundamental en la vida de los niños, pues “se trata del desarrollo mental, además del social’’.

Suprimir recreo como método de castigo
Considerando al recreo como un espacio de interacción y desarrollo social, los especialistas dicen que no debe quitarse éste como forma de castigo.

«Las escuelas deben examinar otros métodos de disciplina, y buscar formas de proveer un recreo seguro y adecuadamente supervisado para todos los niños», sostiene Ramstetter.

Otros estudios
Los resultados son coincidentes con una investigación del Colegio de Medicina Albert Einstein de la Universidad Yeshiva, Nueva York. El informe, publicado en la revista Pediatrics, afirma que «un descanso de 15 minutos o más en el día escolar puede jugar un papel en la mejoría del aprendizaje, el desarrollo social y la salud de los niños en la escuela primaria’’.

Estudiantes de escasos recursos tienen menos descanso
El Colegio de Medicina Albert Einstein estableció que los estudiantes con menos tiempo de descanso provenían de familias de escasos recursos, tenían bajo nivel educativo y asistían a escuelas públicas.

Por este motivo, la institución llama a realizar mayores esfuerzos con estos niños,  ya que la instancia del recreo escolar puede ser su «única oportunidad de practicar sus habilidades sociales con otros niños».