Una gran cantidad de padres de familia piensan que la mejor estrategia para sacar buenas calificaciones en la escuela es estudiar hasta altas horas de la noche. Esta idea ha sido alimentada por lo que podemos ver en diversas películas, series televisivas y caricaturas.
No obstante, la verdadera clave que puede marcar la diferencia entre obtener altas o bajas calificaciones es el tener un patrón de sueño regular, es decir, dormirse y despertarse a la misma hora todos los días.
Esta conclusión fue a la que llegó un grupo de investigadores estadounidenses tras estudiar en un lapso de 1 mes a estudiantes universitarios.
“Nuestros resultados indican que dormirse y despertarse más o menos a la misma hora es igual de importante que la cantidad de horas de sueño que se duerme”, apuntó Andrew Phillips, autor líder del estudio y biofísico en la división de trastornos del sueño y circadianos del Hospital Brigham and Women’s, en Boston, Estados Unidos.
Cabe destacar que la vida universitaria se caracteriza por sesiones de estudio y elaboración de proyectos que se prolongan hasta altas horas de la noche. Esto, aunado a una abundante baraja de opciones para socializar, provoca que los jóvenes tengan un horario de sueño errático.
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Sin embargo, llevar un patrón de sueño impredecible puede ser el hábito que más termine por pasar factura al desempeño académico de los universitarios.
Según las conclusiones de la investigación, que aparecen en la revista especializada Scientific Reports, los patrones irregulares de sueño y vigilia se asociaron con unas calificaciones promedio más bajas.
“Encontramos que el reloj corporal se había desplazado casi tres horas más tarde en los estudiantes con horarios irregulares”, compartió el doctor Charles Czeisler, director del Instituto de Salud del Sueño del citado hospital en Boston.
Para reducir estos patrones y aumentar la calidad en el sueño de los jóvenes, ambos especialistas recomendaron reducir la exposición a la luz durante las noches y tener menos exposición a los dispositivos electrónicos antes de irse a la cama.
Vía: Health Day News
