¿Sabías que las personas con obesidad son más propensas a tener piel seca? Si bien es una enfermedad que desata problemas graves, también provoca la pérdida de agua a través de la piel, situación que conlleva a mayor resequedad y menor capacidad de reparación.

Ante ello, especialistas recomiendan mantener la piel lubricada y evitar la fricción excesiva durante los baños. No hacerlo favorecería la presencia de comezón, eccemas —inflamación de la piel— e irritaciones.

De acuerdo con Linda García, presidenta de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD), es sumamente importante detectar afecciones relacionadas con la piel en personas que padecen obesidad o sobrepeso, pues algunas podrían indicar la presencia de diabetes.

Cuando se presentan pliegues en la piel, aumenta el calor, la humedad y la fricción, ambiente propicio para la aparición de hongos. En este sentido, es esencial mantener esas zonas lo más secas posible; así como usar ropa de algodón, y evitar materiales que favorezcan la sudoración.

“Lo mismo sucede con los pies y entre los dedos, hay que mantenerlos secos. Usar calcetines o medias de algodón que eviten el contacto con los materiales del forro de los zapatos y que favorecen la sudoración y la humedad”, aseveró la especialista.

Conoce más: Psoriasis: ponle atención a tu piel

Los cambios en la piel deben identificarse en zonas específicas, como:

  • Cuello.
  • Axilas.
  • Dorso de las manos.
  • Codos.
  • Rodillas.

Los problemas de irritación no son los únicos enemigos de la piel. Las personas con obesidad también pueden sufrir de vello excesivo en la cara, abdomen y piernas; mientras que el cabello se cae en la parte frontal —alopecia—, debido a cambios hormonales.

Considera que estas manifestaciones dependen, en gran medida, del grado de sobrepeso u obesidad. La mejor forma de prevenirlas es llevando un estilo de vida saludable, en el que se incluya una buena alimentación y actividad física frecuente.

 

Vía: Notimex