El peso de cada persona puede fluctuar de un día para otro debido a una serie de factores. Por ello, muchos especialistas afirman que es mejor evitar pesarte todos los días cuando intentas perder peso.

Pero aunque esto parece tener sentido, poner en práctica lo contrario podría ser beneficioso.

Por ejemplo, en un estudio que duró 6 meses y examinó a personas con sobrepeso u obesidad, aquellas que se subieron a la báscula todos los días consumieron menos calorías y perdieron, en promedio, un 6.6% de su peso corporal, en comparación con las personas del grupo control, que perdieron menos del 1% de su peso corporal.

En otro trabajo que analizó los hábitos de pesarse de 40 personas con sobrepeso, los investigadores descubrieron que aquellas que tomaron descansos de más de 1 mes tenían un mayor riesgo de aumentar de peso.

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Esto significa que pesarte con frecuencia puede brindarte responsabilidad y confirmar que tu peso camina hacia la dirección correcta.

Algunas investigaciones han reportado que pesarse a diario no parece conducir a trastornos alimentarios o efectos psicológicos negativos, como una mala imagen corporal.

No obstante, para algunas personas, revisar la báscula con frecuencia puede convertirse en una fuente de ansiedad. Por lo anterior, si sientes que dicha estrategia no es buena para tu salud mental, es mejor evitarla.

RECUERDA: Toma en cuenta que tu peso puede fluctuar a diario. Los cambios hormonales, el equilibrio de líquidos y la frecuencia de las deposiciones pueden afectar el peso. Tales cambios no reflejan la pérdida o ganancia de grasa.

 

Fuente: Healthline