Investigadores canadienses descubrieron que la práctica de la meditación en jóvenes con cáncer mejora su estado de ánimo, el sueño y su calidad de vida. En un pequeño estudio se somietió a ocho adolescentes con algún tipo de cáncer a sesiones de meditación basada en la conciencia. Cada participante realizó ocho sesiones con una duración de noventa minutos cada una. Otro grupo de cinco adolescentes fue puesto en un grupo de control.
Después de las ocho sesiones, los adolescentes en el grupo de meditación tuvieron menos síntomas de depresión que aquellos en el grupo de control, dijeron los especialistas de la Universidad de Montreal.
Las niñas que fueron sometidas a meditación dijeron haber descansado y dormido mejor, además de haber desarrollado más habilidades de meditación que los varones.
Aunque la investigación no prueba una relación causa-efecto, trabajos anteriores han concluido que la meditación puede beneficiar a los adultos con cáncer, por lo que este hallazgo sugiere que la meditación puede tener los mismos efectos benéficos para los adolescentes con cáncer.
«El apoyo social proporcionado a los adolescentes en el grupo de atención podría explicar los beneficios observados en el estado de ánimo y el sueño, no obstante las intervenciones de este tipo para adolescentes con cáncer se presentan como una opción prometedora para aliviar los inconvenientes psicológicos de vivir con cáncer«, dijo Catalina Malboeuf, quien es la principal autora del estudio.
Este hallazgo supone un gran avance para los adolescentes con cáncer, ya que a menudo experimentan ansiedad sobre cuestiones tales como el dolor físico y emocional de la enfermedad y el tratamiento, la progresión de la enfermedad y los desafíos de vivir con cáncer.
Vía: Healthy Library