Tener mascotas es algo muy común y se ha comprobado que es benéfico para la salud mental. No obstante, si además de mascotas se cuenta con niños pequeños en casa, debe tenerse mucho cuidado, pues los medicamentos de los animalitos pueden ser responsables de llevar a los niños al hospital.

De acuerdo con una reciente investigación estadounidense, las medicinas destinadas a las mascotas suponen un riesgo de intoxicación para cualquier niño que esté en casa, sobre todo si son menores de 5 años de edad.

“Somos conscientes de que las mascotas son habituales y una parte importante de las familias”, aclaró Kristi Roberts, coautora del estudio, “pero las mascotas con frecuencia necesitan medicamentos para mantenerse en un buen estado de salud, y estos medicamentos pueden ser peligrosos para un niño si se expone a ellos”, expuso.

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Kristi, quien forma parte del Centro de Investigación y Políticas de Lesiones del Hospital Pediátrico Nacional en Columbus, Ohio, explicó que las intoxicaciones se producen de varias formas: los niños pequeños pueden recoger las pastillas que hayan escupido las mascotas, o la comida con medicamentos que haya sobrado.

“La mayoría de las exposiciones se producen en casa [el 96%]”, compartió la especialista y, aunque no es común que estas intoxicaciones representen efectos a la salud a largo plazo, Kristi señaló que “algunas recetas, tanto para humanos como veterinarias, pueden ser muy peligrosas incluso en dosis bajas, especialmente para los niños pequeños”.

Si un pequeño toma el medicamento de un animal, el primer paso es llamar a un centro de control de intoxicaciones local, indicó la doctora Bárbara Pena, directora de investigación del departamento de emergencias del Hospital Pediátrico Nicklaus, en Miami.

La doctora recomienda llevar a cabo estos consejos para evitar este tipo de intoxicaciones:

-Mantener los medicamentos (tanto para mascotas como para humanos) en un lugar alto, apartado y que no esté a la vista;
-Guardar los medicamentos para mascotas lejos de los medicamentos para humanos;
-Mantener todos los medicamentos en su recipiente original y con la etiqueta pegada;
-Intentar dárselos a las mascotas en un lugar donde no estén los niños;
-Asegurarse que los animales se pasen los medicamentos y no los escupan.

   

Vía: Health Library