A ti que te encanta hacer ejercicio te preguntarás si esta cuestión es cierta, y quizás no te gustará saber que sàlo es, pues un nuevo estudio realizado por la Universidad de la Ciudad de Nueva York descubrió que dedicar más tiempo al deporte o ejercicio no siempre es sinónimo de perder más peso, por lo menos a largo plazo. El trabajo sugiere que el cuerpo se adapta al gasto de energÃa a partir de cierta cantidad de ejercicio, lo que significa que el consumo de calorÃas se estabiliza. Dicho de una forma más entendible, doblar la cantidad de ejercicio fÃsico no implica un consumo del doble de calorÃas.
El equipo a cargo de la investigación, liderado por Herman Pontzer, analizó los hábitos de alimentación y ejercicio fÃsico de más de 300 hombres y mujeres durante una semana. Todos registraron una relación entre la actividad fÃsica y el gasto calórico al principio del estudio, pero el consumo de energÃa se estabilizaba con el paso del tiempo.
En otro estudio, publicado en la revista PLoS ONE, los investigadores encontraron los mismos resultados en la población indÃgena hadza, un grupo étnico cazador recolector del norte de Tanzania, que presentó una «saturación» en el consumo de energÃa. Aunque podrÃa pensarse que los hadzas requieren mayores cantidades de energÃa para cumplir con sus tareas cotidianas que las personas que viven en sociedades modernas más sedentarias (por ejemplo, en las ciudades), esto no es verdad. Los autores demostraron que el gasto diario de energÃa humana es un rasgo fisiológico que ha evolucionado, independientemente de las diferencias culturales.
Parece que el gasto total de energÃa aumenta con el ejercicio fÃsico cuando sus niveles de actividad son bajos, pero se estabiliza al elevar el grado de ejercicio, pues el cuerpo se adapta para mantener el consumo de energÃa total dentro de un margen muy cerrado. Es decir, el cuerpo de las personas que hacen aún más ejercicio fÃsico consume una cantidad de calorÃas semejante a la de quienes realizan una actividad fÃsica más moderada.
Los cientÃficos creen que el cuerpo se adapta y trata de mantener la demanda de alimentos en un rango determinado; incluso si el esfuerzo fÃsico es alto. Esto lo logra mediante un gasto energético eficiente.
Pese a todo lo anterior, el estudio para nada cuestiona los beneficios de la actividad fÃsica en nuestro cuerpo. Pontzer hizo hincapié en que «el movimiento es muy importante para la salud«. Sin embargo, sà descarta la suposición de que a más actividad fÃsica elevada, mayor será el consumo de calorÃas.
Por ello, no debes hacer un esfuerzo mayor al que tu cuerpo requiere para quemar las calorÃas que realmente necesitas perder, pues podrÃas incluso generar una lesión. Haz mucho ejercicio si asà lo deseas, pero sin perder de vista los lÃmites que tiene tu organismo.
VÃa: Agencia ID