luz-solar-viento-menos-capacidad-visual.2María Arce Romero, jefa del Servicio de Oftalmología y Oculoplástica del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional de Occidente (CMNO) del IMSS en Jalisco, informó que factores como la luz solar y el viento resecan el ojo, disminuyendo su capacidad de percibir detalles finos y aumentando la probabilidad de sufrir un accidente.

Dijo que un contacto prolongado con el medio ambiente, sobre todo con intensa luz solar y viento, reduce la capacidad visual particularmente durante la temporada de calor.

La experta explicó que tanto la luz solar como las corrientes de aire ocasionan una rápida evaporación de las lágrimas, que son indispensables para mantener húmedo el globo ocular y percibir los detalles del entorno.

Destacó que el “ojo seco” podría afectar el desempeño de aquellas personas que realizan actividades al aire libre, como son los trabajadores de la construcción o los repartidores de comida, por mencionar algunos; y eleva el riesgo de sufrir accidentes por visión poco nítida.

La película lagrimal que cubre nuestro ojo contribuye a la agudeza visual. De no cumplirse este requisito la visión nunca será del 100 por ciento, así que si la lubricación no se da de manera natural, existen tratamientos para sustituirla. Un ojo permanentemente seco no es normal y debe corregirse”, aseguró.

Los síntomas del “ojo seco” incluyen un tono rojizo y sensación de cuerpo extraño, principalmente la de traer polvo adherido a la parte externa del globo ocular.

La especialista expuso que lo anterior sucede debido a que la córnea pierde progresivamente sus capas protectoras, es decir, las lágrimas y el oxígeno aportado por el medio ambiente.

Subrayó que quienes son más susceptibles a padecerojo secoson las personas que tienen enfermedades reumáticas como artritis, espondilitis anquilosante o síndrome de Sjögren, ya que su condición hace que produzcan menos lágrimas. Si sus síntomas son agudos el proceso inflamatorio afecta también a las glándulas lagrimales.

Señaló que la lágrima no es un accesorio, pues su función es proteger los ojos y dar nitidez visual, evitando también infecciones gracias a que posee inmunoglobulinas.

La oftalmóloga añadió que hay pacientes reumáticos muy jóvenes y eso no disminuye el riesgo, por lo que deben ser tratados por su especialista e iniciar sustitución lagrimal sin exponerse al aire acondicionado.

Asimismo, la resequedad ocular puede ser ocasionada por un funcionamiento erróneo de los párpados, pues si estos no cierran por completo no podrán distribuir la lágrima en la totalidad del ojo.

Si este fuera el caso, el médico debe analizar la mejor manera de corregir el problema, primero mediante una exploración física y después con un análisis detallado del líquido lagrimal, finalizó Arce Romero.

 

Vía: Notimex