El momento en el que un padre le cuenta un cuento a su hijo resulta un momento muy especial que contribuye en su relación. Además de que la lectura en voz alta es una gran forma de pasar el tiempo en compañía de tu hijo, cuando le lees en voz alta lo estás ayudando a aprender y a desarrollarse, pues esta actividad contribuye al habla, al pensamiento y la escritura, entre otros.
Y es que son numerosos los frutos que la lectura puede tener en la vida de los pequeños, por lo que no puedes dejar de hacerlo. De acuerdo con Conaculta, cuando los niños escuchan una historia, se ven involucrados en una actividad emotiva e intelectual, en tanto surgen distintas relaciones y correspondencias.
De acuerdo con la Asociación Americana de Bibliotecarios Escolares, los beneficios de esta actividad incluyen una mejora en la autoestima y la sensación de seguridad.
La lectura en voz alta contribuye, además, a que la comunicación entre el padre y el niño sea mejor.
Por otra parte, permite enseñarle a los pequeños conceptos como los colores, las formas, las letras y los números de una manera divertida.
Fomenta que se mejoren ciertas habilidades como la escucha, el lenguaje, la memoria y el vocabulario.
Le presenta el mundo que lo rodea.
Permite que desarrolle una actitud positiva, un comportamiento saludable y valores sociales.
Asimismo, al leerle en voz alta, estarás fomentando en el pequeño el amor por la lectura.
Vía: HealthDay News, Conaculta
