Quizás no lo sabías, pero dar esteroides a las mujeres embarazadas que se encuentran en riesgo de parto prematuro tardío reduciría el riesgo de que sus bebés sufran problemas respiratorios graves; así lo afirma un estudio reciente publicado en la revista New England Journal of Medicine.
La investigación incluyó a más de 2 mil 800 mujeres embarazadas que tenían un riesgo elevado de parto prematuro tardío (entre 34 y 36 semanas de embarazo), quienes fueron seleccionadas al azar para que recibieran 2 inyecciones del esteroide betametasona o de un placebo en un lapso de 24 horas.
El esteroide es comúnmente utilizado para prevenir complicaciones en los bebés que nacen antes de la semana 34 de embarazo. En el ámbito médico, se considera que un embarazo a término completo dura 40 semanas.
Los bebés nacidos de madres que recibieron el esteroide tuvieron muchas menos probabilidades de sufrir complicaciones respiratorias graves poco tiempo después de nacer, en comparación con los bebés nacidos de madres que recibieron el placebo. Tales complicaciones implican una larga estancia en la unidad de cuidados intensivos neonatales, o que el bebé sea sometido a tratamientos respiratorios.
«Nuestro estudio demuestra que administrar un medicamento que se usa habitualmente para prevenir las complicaciones de los bebés antes de las 34 semanas de gestación, también puede reducir el riesgo de muchas complicaciones graves en los bebés nacidos solamente unas semanas antes de término», comentó la doctora Cynthia Gyamfi-Bannerman, autora principal del trabajo y profesora asociada de salud de las mujeres en el Centro Médico de la Universidad de Columbia en la ciudad de Nueva York; y agregó que «esto transformará el modo en que cuidamos a las madres en riesgo de parto prematuro tardío».
Anualmente, cerca del 8 por ciento de los bebés nacidos en Estados Unidos (alrededor de 300 mil) nacen en partos prematuros tardíos. Aproximadamente el 12 por ciento de estos bebés manifiesta problemas respiratorios u otras complicaciones graves, lo que requiere de estancias largas en la unidad de cuidados intensivos neonatales, afirmaron los investigadores.
«Aunque la supervivencia de los bebés que nacen de forma prematura tardía es comparable con los que nacen a término, la tasa de problemas respiratorios y otras complicaciones graves en este grupo no es comparable y sigue siendo inaceptablemente alta», enfatizó Gyamfi-Bannerman.
«Ampliar el uso de un medicamento bien estudiado y seguro para mejorar el desarrollo pulmonar antes de nacer ofrece un medio para prevenir muchas de estas complicaciones», finalizó la experta.
Vía: Health Library
