Una diversión segura y saludable para los niños con asma puede estar tan cerca como la alberca de tu colonia, o al menos así lo asegura un especialista en enfermedades respiratorias.

Permanecer activo puede ser un reto para los casi 9 millones de niños con asma que viven en México.

«Puede ser un dilema para muchas familias. Todo lo que se necesita es un ataque de asma, y ​​de repente los pacientes pueden volverse muy tentativos a exagerarlo», señaló el doctor Tod Olin, especialista pulmonar pediátrico en National Jewish Health, en Denver.

«Cuando se trata de actividades cardiovasculares que son bien toleradas, la natación, en concreto, es muy recomendable, sobre todo en albercas cubiertas«, afirmó Olin.

La elevada humedad en las albercas techadas protege contra los ataques de asma, manteniendo las vías respiratorias abiertas, indicó.

«Creemos que la forma en que ocurren los ataques de asma es que las vías respiratorias se secan, y eso provoca una cascada de reacciones que, en última instancia, exprime la vía aérea«, explicó Olin. «Si podemos evitar ese paso inicial de secado de las vías respiratorias manteniéndonos en un ambiente húmedo, previnimos el ataque de asma en su conjunto«.

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Es frecuente decirle a los niños con asma que limiten el ejercicio, dijo Olin. «Más recientemente, hemos cambiado nuestro enfoque […] Ahora animamos a los niños a hacer ejercicio, sobre todo porque la epidemia de obesidad se ha vuelto cada vez más problemática».

Comenzando con la natación y dejando que los niños con asma elijan los deportes que más disfrutan, aumenta la probabilidad de que se mantengan activos, destacó.

«Generalmente recomiendo que usen su inhalador de albuterol unos 15 minutos antes del ejercicio, pero si su asma está bien controlada, no hay razón para limitar ninguna actividad«, subrayó Olin. «Si su corazón los está llevando hacia cierto deporte, debería motivárseles a perseguirlo».

Finalmente, es importante verificar la higiene de las albercas, así como tomar una ducha antes y después de la natación para evitar infecciones y mayores daños por el cloro de la alberca.

 

Vía: Health Library