La exposición al humo de los cigarrillos durante el embarazo y la lactancia puede dañar la fertilidad de los descendientes varones.
“Por desgracia un 25% de mujeres jóvenes aproximadamente continúa fumando durante el embarazo o lactancia, por lo que la fertilidad de sus hijos podría resultar dañada”, expone Eileen McLaughlin investigadora principal del estudio.
Los científicos de la Universidad de Newcastle realizaron un estudio mediante exponer durante un período de seis semanas a un grupo de 27 ratones hembra a una cantidad de humo equivalente a 24 cigarrillos en seres humanos.
Una vez expuestos a estas altas concentraciones de tabaco dejaron que los animales se aparearan y continuaron exponiéndolas al humo durante el embarazo y la lactancia. Se examinó periódicamente a los 108 descendientes macho (del ensayo y del grupo de control) hasta su madurez.
La exposición al tabaco se relacionó había con daño a las células madre testiculares. Este daño en el ADN podría también resultar en un aumento del riesgo de malformaciones y cáncer en los hijos de los descendientes macho de las madres expuestas.
“Nuestros resultados muestran que los descendientes macho de madres «fumadoras» tienen menos espermatozoides, que se desplazan mal, presentan anomalías en las formas y no se fijan a los óvulos durante los estudios de fertilización in vitro. En consecuencia, estas crías son subfértiles o infértiles cuando alcanzan la madurez” afirmó McLaughlin.
Este estudio recomienda a las mujeres embarazadas y que se encuentren en periodo de lactancia que suspendan el hábito tabáquico para evitar daños a su descendencia y la de sus hijos varones especialmente.
Vía: Sobinoff et al, Hum. Reprod. Septiembre 2014
