La inflamación abdominal se debe a muchos factores, como deglución de aire, acumulación de líquidos, intolerancia a la lactosa, quistes ováricos, entre otros. Sin embargo, los procesos inflamatorios gastrointestinales pueden convertirse rápidamente en colitis crónica y, posteriormente, en cáncer de colon.
De acuerdo con Porfirio Nava, químico adscrito al Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN, el cáncer es multifactorial, pero podría comprenderse su origen y desarrollo mediante el estudio de las enfermedades inflamatorias intestinales.
Es importante que ante cualquier molestia en el abdomen acudas con un médico. Considera que una inflamación pude ser curable en el inicio, pero fatal si se descuida. Presta mayor atención si la inflamación está acompañada de dolor. Otros síntomas pueden ser:
- Cambio en el diámetro de las deposiciones.
- Deposiciones con sangre.
- Heces negras.
- Incomodidad del bajo vientre.
Según un estudio de la Universidad de Harvard, en Boston, adoptar un estilo de vida saludable puede reducir, hasta un 30%, el riesgo de padecer cáncer de colon. Los factores de vida recomendables son:
- Consumir menos alcohol y carne roja.
- Ingerir más frutas y verduras.
- Mantener el peso bajo control.
- Llevar una vida activa.
- Evitar fumar.
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Visita a un médico con frecuencia y solicita un chequeo general. También, averigua tus antecedentes hereditarios. Si alguno de tus familiares ha tenido cáncer de colon, sobre todo antes de los 50, háblalo con un especialista.
Vía: Notimex/ Medline Plus
