¿Sabías que la inflamación forma parte del sistema curativo del cuerpo? Pese a ello, si es demasiada o persiste, es signo de preocupación. Por ejemplo, la inflamación crónica se relaciona con aterosclerosis, misma que lleva a problemas del corazón, accidentes cerebrovasculares y Alzheimer.
En este contexto, la inflamación no ocurre por sí sola. Cuando aparece se debe a ciertos factores externos, como el tabaquismo, la falta de actividad física y la alimentación.
Algunos alimentos que podrían propiciar esta respuesta del cuerpo —al ser ricas en grasas y altas en calorías— son:
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Aceite y grasas trans
Esto no quiere decir que todas las grasas provoquen inflamación o te hagan daño. Puedes cambiar las grasas “malas” por aceite de oliva, el cual contiene propiedades anti-inflamatorias y Omega-3. Consume pescado, tofu, soja y nueces.
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Azúcar
Consumir azúcar en exceso contribuye a la formación de caries, obesidad y diabetes, pero también, aumenta los niveles de triglicéridos y el riesgo de enfermedades cardíacas. Altos niveles de azúcar producen inflamación que lesiona los vasos sanguíneos y llevan al aumento de peso.
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Alimentos refinados
Este tipo de productos —pan y arroz blanco, papas fritas y refrescos— contienen mucha azúcar y carbohidratos, mismos que aumentan los niveles de agentes inflamatorios —citoquinas—. Lo mejor es optar por productos integrales.
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Alcohol
Beber alcohol aumenta los niveles de proteína C reactiva, motivo de inflamación, de acuerdo con investigadores de la Universidad de Harvard. Si vas a beber, hazlo con moderación.
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Carnes procesadas
Productos como las salchichas, el tocino, el jamón y las carnes ahumadas, aumentan la producción de sustancias nocivas —AGE— que contribuyen a la inflamación de las células del cuerpo, promoviendo enfermedades cardíacas y el riesgo de cáncer de colon.
Recuerda que es importante consumir frutas y verduras; éstas contienen sustancias que revierten la inflamación, según datos de la Universidad de Harvard. Incorpora productos naturales a tu dieta, como nueces, cacahuates, almendras y otros granos y semillas.
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Vía: Hola Doctor
