Aunque las infecciones urinarias puedan parecer un problema de salud propio de adultos, lo cierto es que esta clase de afecciones son bastante comunes en los niños.
Estas infecciones aparecen cuando las bacterias o gérmenes entran en la vejiga o en los riñones.
Aunque la mayoría de los casos son leves, es de suma importancia que los niños con una infección urinaria sean llevados al médico, ya que estas no se curan solas y, de no tratarse, pueden convertirse en infecciones graves.
Generalmente son fáciles de tratar y suelen desaparecer tras recibir el tratamiento adecuado en un plazo aproximado de una semana.
Conoce más: ¿Cómo preparar a tu hija adolescente para su primera visita al ginecólogo?
Las infecciones urinarias son más frecuentes en las niñas que en los niños, debido a que la uretra es más corta en las mujeres. Asimismo, los niños menores de 1 año no circuncidados también tienen un riesgo ligeramente mayor de desarrollar este tipo de afecciones.
Signos
Algunos de los signos que alertan sobre la posible presencia de estas infecciones son:
-Dolor y sensación de escozor o quemazón al orinar.
-Urgencia para orinar o necesidad más frecuente para hacerlo.
-Fiebre.
-Necesidad de levantarse mucho por la noche para orinar.
-Mojar la cama por la noche.
-Dolor en el área de la vejiga (debajo del ombligo).
-Orina maloliente que puede tener un aspecto turbio o contener sangre.
Este tipo de infecciones comúnmente son tratadas con antibióticos. No obstante, el tipo de medicamento y la dosis solamente puede ser indicados por un médico, por lo que la automedicación queda completamente desaconsejada.
Prevención
Los padres pueden ayudar a sus hijos a prevenir infecciones urinarias, siguiendo algunos consejos como:
1. En la lactancia y la primera infancia, el cambio frecuente de pañales puede ayudar a prevenir la proliferación de las bacterias que provocan estas infecciones.
2. Cuando los niños empiezan a utilizar el inodoro y a limpiarse solos, es importante enseñarles adecuados hábitos higiénicos. A las niñas, por ejemplo, se les debe enseñar que la forma ideal de limpiarse con el papel higiénico es de delante hacia atrás (no de atrás hacia delante).
3. Las niñas en edad escolar deben evitar los baños de burbujas y los jabones fuertes e irritantes. Asimismo, su ropa interior debe ser de algodón.
4. A los niños de ambos géneros se les debe enseñar a no aguantarse las ganas de orinar, ya que la orina que permanece en la vejiga proporciona a las bacterias un campo de cultivo ideal para proliferar.
5. Los niños deben beber una cantidad abundante de líquidos, evitando las bebidas que contengan cafeína, como los refrescos y el té.
Vía: Kid’s Health
