Si eres de ese grupo de hombres que se dedican a la actividad física de alto impacto y de resistencia, que incluye principalmente a los adolescentes y adultos jóvenes, aumentarás tus probabilidades de tener una mayor densidad ósea en la mediana edad. Este descubrimiento se logró gracias a un estudio realizado por investigadores del Colegio de Ciencias Ambientales Humanas de la Universidad de Missouri-Columbia y publicado recientemente en la revista American Journal of Men’s Health.
Con el tiempo, las actividades de alto impacto – como correr, trotar o jugar tenis – ayudan a incrementar la masa ósea en el área lumbar y la cadera y, de acuerdo con los investigadores, tener una mayor masa ósea puede ayudar a evitar la enfermedad que debilita los huesos conocida como osteoporosis.
«Mientras que la osteoporosis se asocia comúnmente solo con las mujeres con postmenopausia, de hecho también representa un problema grave para los hombres», dijo la autora del estudio Pamela Hinton, profesora asociada en el departamento de nutrición y fisiología del ejercicio de esa universidad.
«De hecho, la investigación ha demostrado que las consecuencias de la osteoporosis pueden ser mucho peores para los hombres, ya que son menos propensos a ser diagnosticados y están en un mayor riesgo de mortalidad por fracturas que se producen como resultado de una caída», añadió Hinton.
Para el estudio, los especialistas analizaron los datos médicos de 203 hombres de entre 30 y 65 años. Los participantes tenían diversos niveles de experiencia con el deporte y el ejercicio, y se involucraron en diferentes tipos de actividades.
Los hombres que participaron realizando ejercicio que requería cargar peso o ejercer carga en los huesos, en este caso adolescentes, registraron una mayor densidad ósea más tarde en la vida, dijeron los investigadores. Lo anterior demostró que las actividades de alto impacto, en particular, son importantes para la salud ósea a lo largo de la vida de los hombres.
«La cuestión más importante es que, si estás sano, nunca es demasiado tarde para comenzar actividades de alto impacto o un entrenamiento de resistencia para mejorar la densidad mineral ósea», afirmó Hinton.
«Si bien la actividad durante el crecimiento esquelético es significativa, también vimos asociaciones positivas entre la actividad física y la densidad ósea en todas las edades. Así que incluso los hombres de mediana edad que pasaron sus años adolescentes sentados en el sofá podrían considerar las ventajas de comenzar un programa de ejercicio para fortalecer los huesos», agregó Hinton.
Es importante aclarar que el estudio no demuestra que exista causa-efecto, pero sí encontró una asociación entre el ejercicio de alto impacto y la densidad ósea en los hombres.
Vía: Health Library
