Cuando una persona sufre un accidente que provoca heridas, ya sean graves o leves, sucede todo un proceso de curación; en él, el cuerpo genera reacciones que ayudan a la formación de coágulos —cascada de coagulación— a través de proteínas especiales.

Cuando este proceso no cuenta con los factores necesarios, es probable que se presente un exceso de sangrado, es decir, que se padezca hemofilia. En la mayoría de los casos, esta afección es hereditaria y se transmite, con mayor frecuencia, a los hijos varones.

Ante ello, es sumamente importante diagnosticar la hemofilia desde la niñez. De acuerdo con Ramón Iván de Dios Pérez, especialista del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, se debe vigilar la salud de los menores —de entre nueve y 24 meses de edad— y determinar si presentan hinchazón y moretones en articulaciones, codos o manos.

«Lamentablemente, ese cúmulo de sangre causado por un golpe, incluso leve, se va a las articulaciones y puede impedirle al niño el movimiento, por eso es muy importante que se haga un diagnóstico temprano de la enfermedad y así evitar complicaciones en la vida adulta de los pacientes», afirmó.

Para diagnosticar la enfermedad, es necesario acudir con un médico, el cual realizará exámenes de sangre para determinar la actividad del factor VIII y IX, es decir, para saber si las proteínas que participan en el proceso de coagulación sanguínea están estables; así como para determinar si se trata de una afección leve, moderada o grave.

«(En estos casos), el paciente deberá tener cuidados generales durante toda su vida, como no dedicarse a una actividad que cause muchas lesiones, y llevar tratamiento profiláctico —preventivo— semanal, o adicional en caso de una emergencia», aseveró.

Conoce más: 5 tips para controlar el sangrado abundante en una herida

Presta atención a la forma en la que reacciona el cuerpo de tu hijo ante estímulos físicos, con la finalidad de detectar a tiempo éste u otros males. De igual forma, es importante compartir esta información con familiares consanguíneos.

 

Vía: Notimex/ Medline Plus