¿Alguna vez has notado hematomas en tu cuerpo y no sabes por qué? Cuando esto ocurre, se han roto pequeños vasos sanguíneos de la parte afectada, en consecuencia, sus contenidos se filtran dentro del tejido blando —debajo de la piel—.
Existen tres tipos de hematomas:
• Subcutáneos – debajo de la piel.
• Intramusculares – dentro de la parte protuberante del músculo subyacente.
• Periósticos – en el hueso.
Los moretones pueden durar desde días, hasta meses. Los más graves y dolorosos son aquellos que ocurren en los huesos.
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Ciertamente, las causas más comunes son: caídas, lesiones deportivas, accidentes automovilísticos o golpes recibidos de otras personas u objetos. Sin embargo, también influyen otros factores, como la toma de anticoagulantes.
Síntomas
• Dolor.
• Inflamación.
• Cambio de color. Pasa de rojo rosáceo a un color azuloso, luego amarillo verdoso, y finalmente regresa al color normal de la piel.
Tratamiento
• Aplica hielo sobre el hematoma para ayudarlo a sanar más fácilmente y reducir la inflamación.
• Mantén, en la medida de lo posible, la zona del hematoma levantada por encima del nivel del corazón. Esto evitará que la sangre se estanque en el tejido afectado.
• Trata de descansar la parte del cuerpo que presenta el hematoma, evitando sobrecargar de trabajo los músculos en dicha zona.
• Usa paracetamol (Tylenol) para ayudar a reducir el dolor, en caso de ser necesario.
¡Evita hacerlo!
• No intentes vaciar el hematoma con una aguja.
• No realices muchas actividades utilizando la parte del cuerpo afectada.
• No ignores el dolor, ni la hinchazón.
Vía: Medline Plus
