Un estudio presentado en el marco de las Sesiones Científicas de 2014 de la Sociedad Americana del Corazón concluyó que un mayor consumo de grasas trans está vinculado con una peor memoria entre los hombres en edad laboral.
Para el estudio se incluyeron a mil hombres, y los investigadores observaron que aquellos que consumían una mayor cantidad de grasas trans tuvieron un rendimiento notablemente más bajo en una prueba de memoria.
La asociación se mantuvo a pesar de que los investigadores tomaron en cuenta diversos factores como la edad, educación, grupo étnico y padecimientos mentales como la depresión.
Beatrice A. Golomb, autora principal del estudio y profesora de Medicina en la Universidad de California-San Diego apuntó que las grasas trans estuvieron relacionadas con una memoria más deficiente en hombres jóvenes y de mediana edad, es decir, las edades en las que están dentro del ámbito laboral, lo que perjudica el progreso de sus carreras.
Golomb señaló que el consumo de grasas trans “se ha relacionado con mayor peso corporal, más hostilidad y las enfermedades del corazón. Mientras las grasas trans aumentan la vida útil de los alimentos, reducen la vida útil de la gente”.
A los sujetos se les aplicó un estudio dietético y una prueba de memoria en la que se mostraba a los pacientes una palabra escrita y debían indicar si era una palabra nueva o una repetida de una tarjeta anterior.
Los investigadores observaron que aquellos que recordaban cerca de 11 palabras menos que la media (86 palabras) eran aquellos que consumían una mayor cantidad de grasas trans. Esto se traduce que por cada gramo adicional de grasas trans eran falladas cerca de 0.76 palabras.
Los especialistas recomiendan una dieta balanceada en la que las cantidades de grasas trans a consumir (incluidas en la “comida chatarra” o bebidas con azúcar muy refinada como los refrescos) deben ser muy pocas.
Los expertos en nutrición consideran que una alimentación balanceada debe incluir todos los grupos de alimentos, limitando los azúcares y las grasas.
Sí le interesa tener una alimentación balanceada consulte a un nutriólogo para diseñar una dieta de acuerdo a sus necesidades.
Vía: El Mundo e Infosalus
