Las personas con colitis ulcerosa (CU) pueden correr riesgo de sufrir deficiencias nutricionales debido a problemas digestivos y cambios en su dieta.

Según los expertos, la diarrea crónica, así como la inflamación presente en la colitis ulcerosa, irrita el tracto gastrointestinal y puede llevar a una ingesta restringida de alimentos, ya que las personas intentan evitar los alimentos que resultan irritantes o que producen síntomas gastrointestinales, como las verduras crudas o legumbres.

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No es raro que las personas consuman de forma inadvertida dietas bajas en fibra y con baja densidad de nutrientes, ya que los alimentos hiperprocesados y refinados tienden a producir menos síntomas cuando hay una inflamación significativa en el intestino.

Con el tiempo, esto puede provocar pérdida de peso, desnutrición y deficiencias de vitaminas o minerales.

Los especialistas enfatizan que las personas con CU pueden [también] tener mayores necesidades de nutrientes debido a la inflamación crónica y la diarrea. Asimismo, la ingesta inadecuada de ciertos nutrientes puede empeorar los síntomas e incrementar el riesgo de complicaciones.

 

Fuente: Medical News Today