La gastritis atrófica es una forma crónica de gastritis. En esta, la inflamación causa pérdida de las glándulas en el revestimiento del estómago que producen jugo gástrico y enzimas. La condición también ha sido asociada con el desarrollo de cáncer de estómago.

Una persona corre mayor riesgo de desarrollar gastritis atrófica si entra en contacto con la bacteria Helicobacter pylori. Esta enfermedad global es más común en áreas del mundo que tienen extrema pobreza o que se encuentran superpobladas.

La gastritis atrófica autoinmune es mucho menos común. Aunque su prevalencia es menor, es más probable que se presente en personas de ascendencia afroamericana, asiática, hispana o del norte de Europa.

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Las personas con otras afecciones médicas poseen mayor riesgo de sufrir gastritis atrófica autoinmune. Tales condiciones incluyen las siguientes:

  1. Enfermedad de tiroides
  2. Diabetes tipo 1
  3. Vitíligo, un trastorno de la pigmentación
  4. Enfermedad de Addison (trastorno en el que las glándulas suprarrenales no producen suficientes hormonas).

Además, las personas con gastritis atrófica poseen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de estómago.

 

Fuente: Medical News Today