preescolares-iSegún un nuevo estudio, la siesta podría tener un papel crucial en los infantes y preescolares para poder recordar cosas de reciente aprendizaje.

Investigadores examinaron la habilidad de los niños pequeños para reconocer casos que son similares, pero no idénticos, a alguno que recientemente aprendieron y aplicarlos en una nueva situación, una habilidad llamada generalización. En el lenguaje, esto incluiría ser capaz de distinguir un patrón gramático en un enunciado que nunca hayan escuchado antes, o entender una palabra sin importar quien la pronuncia, según explican los autores.

Las pruebas mostraron que las generalizaciones del lenguaje fueron mejores en los infantes y los preescolares después de que tomaron una siesta, de acuerdo con los resultados de esta investigación que se presentó esta semana en la reunión anual de la Sociedad de Neurociencia Cognitiva en Boston.

En un comunicado de prensa, la investigadora Rebecca Gomez, de la Universidad de Arizona, sostiene que el sueño es un factor esencial para ampliar lo que se ha aprendido a nuevos ejemplos, “las siestas inmediatamente después del aprendizaje parecen ser particularmente importantes para la generalización del conocimiento en los infantes y preescolares”.

Durante la reunión también se presentó otro estudio, el cual sostiene que un sueño adecuado permite a los adultos recordar sus intenciones a futuro. “Cuando hacemos planes para las próximas vacaciones o cuando pensamos en qué cenaremos en la noches, esos planes dependen en gran medida de nuestra habilidad de recordar lo que deseamos hacer en el momento apropiado en el futuro”, puntualiza la investigadora Sussanne Diekelmann, de la Universidad de Tubingen, Alemania.

“Las probabilidades de que recordemos realizar nuestras intenciones en el momento apropiado en el futuro es sustancialmente más alta si durante la noche tenemos un buen descanso después de haber decidido nuestras intenciones”, agregó.

Vía: Sociedad de Neurociencias Cognitivas