Algunos tipos de algas producen toxinas nocivas (venenos). Una acumulación de estas algas se conoce como floración de algas nocivas, las cuales se pueden encontrar tanto en ambientes marinos como de agua dulce, así lo indica el Departamento de Salud del Gobierno del Estado de Victoria, en Australia.

Las toxinas producidas por la proliferación de algas nocivas en un ambiente marino pueden afectar la salud humana, así como los mariscos recolectados del agua afectada por las algas.

Las algas verdiazules, o cianobacterias, son algas dañinas que se pueden encontrar en casi todos los sistemas de agua dulce. Se pueden encontrar en arroyos, ríos, lagos y humedales, y pueden aparecer individualmente o en grupo.

Las algas verdiazules pueden multiplicarse rápidamente en aguas cálidas y de movimiento lento, que son más comunes en verano y otoño. En estas condiciones, pueden formarse floraciones (o «espumas») en la superficie del agua. Las floraciones pueden variar en color desde el verde oscuro hasta el marrón amarillento o el rojo, aunque es posible que no sean visibles de inmediato.

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¿Cuáles son los impactos en la salud de las algas nocivas?

Los impactos en la salud de las algas nocivas pueden variar según el tipo de toxina algal presente y el tipo de exposición.

El contacto directo de la piel con toxinas de algas puede causar irritación cutánea y ocular.

La inhalación de rocío fino o de gotitas de agua afectada por algas puede causar efectos respiratorios leves y síntomas similares a la fiebre del heno. Esto ocurre más comúnmente durante las actividades recreativas de contacto con el agua que crean un rocío fino o gotitas, como por ejemplo nadar, esquiar en el agua, manejar motos acuáticas y pasear en bote.

Beber agua afectada por algas o consumir alimentos (como pescado o mariscos) que contengan toxinas puede provocar gastroenteritis, que a su vez puede provocar vómitos, diarrea, fiebre y dolores de cabeza. Estas toxinas también pueden afectar el hígado o el sistema nervioso.

Con base en la información anterior, si estás preocupado por tu salud, consulta a tu médico de cabecera de inmediato.

Las mascotas y el ganado también pueden verse afectados por algas nocivas. Si crees que tus animales no se encuentran bien, consulta a su veterinario.

 

Fuente: Better Health Channel – Department of Health, State Government of Victoria, Australia