Si experimentas mucha picazón en la piel cuando vas a acostarte, sin mencionar que además tienes una erupción similar a uno o varios granos, seguramente te preguntarás cuál es la causa.
Lo anterior son signos bastante claros de sarna, una infestación parasitaria microscópica donde los ácaros se esconden debajo de la piel y ponen huevos ahí.
Dicha infección proviene del contacto prolongado, no solo de un roce rápido contra la piel de otra persona. También se puede transmitir a través de la ropa de cama o la ropa corporal.
Un médico es quien debe identificar la sarna, pero los signos que pueden ayudarte a detectarla suelen incluir sarpullido y picazón intensa que empeora durante la noche.
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De acuerdo con la Academia Estadounidense de Dermatología (AAD), los ácaros se encuentran más comúnmente entre los dedos, alrededor de las uñas, en los codos, las muñecas, en la línea del cinturón, en el área genital y alrededor de los pezones.
En ocasiones, los niños experimentarán una erupción en todo el cuerpo, incluido el cuero cabelludo. Los bebés suelen tenerla en las palmas de las manos y en las plantas de los pies, señala la AAD.
De acuerdo con los expertos, aunque la sarna es contagiosa, los niños generalmente pueden regresar a la escuela al día siguiente del tratamiento. Los medicamentos para la sarna incluyen cremas y pastillas, y la condición no se resolverá sin el tratamiento correcto.
Una forma grave llamada sarna con costra, o sarna noruega, provoca costras generalizadas en la piel con cientos o miles de ácaros (en lugar de 15 o 20 que es el número común). Esta, puede afectar a aquellas personas con sistemas inmunitarios debilitados, advierte la AAD.
Fuente: Health Day
