La alimentación y los hábitos que conciernen a ella siguen siendo algo que nos cuesta mucho trabajo a los mexicanos. La mayoría de la población padece al menos una enfermedad gastrointestinal, siendo la colitis y gastritis las más comunes. No obstante, existe otra denominada duodenitis, la cual es mejor prevenir.

Se conoce como duodenitis a la inflamación del duodeno, que es el nombre con el se le conoce al comienzo del intestino delgado. Esta enfermedad principalmente acompaña a otros problemas de salud, como la hepatitis, gastritis y dispepsia (trastorno que aparece después de comer y sus síntomas más frecuentes son náuseas, pesadez, dolor de estómago, ardor y flatulencia).

Existen dos tipos principales de duodenitis:

Aguda: puede presentarse súbitamente y persistir por periodos cortos de tiempo, sin embargo, los síntomas suelen ser graves y muy intensos.

Crónica: persiste durante largos periodos de tiempo (meses e incluso años). A menudo no presenta síntomas durante la mayor parte del tiempo, intercalando con fases cortas de síntomas severos.

Algunos de los síntomas de esta enfermedad pueden presentarse diariamente o de vez en cuando, estos son:

-Distensión abdominal
-Dolor abdominal
-Gases
-Pérdida del apetito
-Náuseas, con o sin vómito

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En algunos casos extraordinarios, la duodenitis puede ser potencialmente mortal. Los síntomas para identificar estos casos son:

-Sangre en las heces
-Dolor abdominal severo
-Vómitos de sangre

Las causas que propician su aparición son, en gran parte, los mismos que la gastritis. Los factores que aumentan el riesgo de su aparición son:

-Abuso de alcohol
-Enfermedad de Crohn (enfermedad inflamatoria intestinal que puede afectar a cualquier parte del intestino)
-Infección por H. pylori (un tipo de bacteria)
-Historial de radioterapia
-Uso prolongado de antiinflamatorios no esteroideos, tales como el ibuprofeno, naproxeno o aspirina (automedicación)
-Estrés
-Fumar

Para prevenirla, basta con seguir una sencilla serie de recomendaciones:

-Evitar el uso prolongado de aspirinas o antiinflamatorios no esteroideos-inflamatorios
-Evitar la automedicación
-Evitar una dieta rica en alimentos irritantes
-Evitar el abuso de alcohol
-Reducir en medida de lo posible el estrés

 

Vía: duodenitis.info