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Se dice que la primera comida del día es la más importante. Si bien todas las comidas y los refrigerios recomendados son esenciales para mantener una buena nutrición y cuidar nuestro organismo, el desayuno tiene una importancia muy particular.

De acuerdo con un estudio publicado en The Journal of Nutrition, brincarse el desayuno se relaciona con un mayor riesgo de diabetes tipo 2. Para llegar a esta conclusión, se unieron los resultados de seis investigaciones; en ellas, se analizaba a personas que se “salteaban” esta comida, así como la frecuencia en la que lo hacían.

Los resultados indicaron que el riesgo de tener diabetes tipo 2 se incrementaba cada vez que una persona omitía un desayuno. Además, el riesgo fue mayor cuando se saltaban de 4 a 5 desayunos por semana.

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¿Es importante la calidad del desayuno?

Aunque estos estudios no se enfocaron en la calidad del desayuno, es fundamental que éste sea muy completo. Lo ideal es tomar un desayuno equilibrado, que contenga alimentos que proporcionen proteínas, como lácteos (leche baja en grasa, queso bajo en grasa o yogur bajo en grasa), claras de huevo, proteína vegetal (como nueces o semillas) y una legumbre, como frijoles.

Para obtener energía, es deseable que se incluyan granos enteros (avena u otro cereal integral sin azúcar añadida) y frutas o vegetales que aporten vitaminas y minerales.

¿Qué debemos evitar? Carne roja, carne procesada, alimentos fritos y azúcares. 

Ahora que ya conoces la importancia del desayuno, es conveniente que te tomes un tiempo para comer por la mañana. No olvides elegir un desayuno equilibrado. Si tienes dudas respecto a recetas o sobre los alimentos que puedes incluir en esta comida, acércate a un especialista en nutrición.

 

Vía: Hola Doctor