¿Podría el peso de los padres afectar el desarrollo social de sus hijos más pequeños? Un reciente estudio sugiere que sí.

Investigadores del Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano de Estados Unidos, encontraron que los niños de 3 años de edad con padres que padecen obesidad pueden mostrar señales de retrasos en su desarrollo, como malas habilidades sociales.

Asimismo, informaron que los problemas concretos en su desarrollo parecen variar en función de si la mamá, el papá o ambos tienen obesidad.

La obesidad de las mamás se asoció con un retraso en los logros de las habilidades motoras finas, y la obesidad de los papás con los logros en las habilidades personales y sociales, que incluyen la capacidad de interactuar con los demás”, compartió Edwina Yeung, investigadora principal del estudio.

De acuerdo con Edwina, quien además es investigadora de la división de investigación intramuros sobre la salud de la población del citado instituto, “el hecho de que ambos padres tuvieran obesidad supuso que se necesitó un mayor tiempo para desarrollar las habilidades de resolución de problemas”.

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Los investigadores encontraron que, comparado con niños con madres sin problemas de peso, los hijos de madres con obesidad presentaron un 67% más de probabilidades de no pasar una prueba de habilidades motoras finas (usando las manos y los dedos).

También, hallaron que los hijos de 3 años de papás con obesidad presentaron hasta un 71% más de probabilidades de no pasar las pruebas de habilidades personales y sociales, las cuales se pueden utilizar para indicar qué tan bien se relacionan e interaccionan con los demás.

Aunque los investigadores comentaron que aún no pueden explicar con total seguridad la conexión entre la obesidad de los padres y los problemas de desarrollo de los niños, destacaron que podría deberse a mutaciones genéticas o a otros factores genéticos heredados por los papás.

“Nuestros hallazgos sugieren que hay factores de los papás que podrían también jugar un papel y ameritar atención”, dijo la investigadora principalmente. Finalmente, el estudio, publicado en la revista Pediatrics, concluye diciendo que los resultados aún necesitan más investigaciones, por lo que instaron a que los padres con obesidad no deben preocuparse mucho.

   

Vía: Health Library