dermatitis-iLos especialistas aseguran que con la llegada del invierno aumentan en niños los síntomas de dermatitis atópica, pues los cambios bruscos de temperatura, el frío y las calefacciones a nivel alto empeoran las condiciones de los menores con dermatitis atópica debido a que se deshidrata la piel. Los expertos aseguran que la dermatitis atópica afecta a 20 por ciento de la población infantil de los países industrializados.

La dermatitis atópica es la enfermedad de la piel más frecuente en niños (aunque de forma menos común también puede atacar a adultos) y se manifiesta a partir de los cuatro meses de edad. Entre los síntomas de la dermatitis atópica se encuentran sequedad, enrojecimiento, descamación y prurito. El estado inflamatorio de la enfermedad causa hiperactividad en la piel lo que provoca que esta responda a la presencia de algunos estímulos como el frío, cambios bruscos de temperatura, algún tipo de ropa, jabón, la sudoración, entre otros. Generalmente el padecimiento es causado por alergias.

Los expertos aseguran que abrigar a los niños en exceso no es una solución pues podría provocar sudoración y agravar los síntomas debido al constante roce de la ropa con la piel, además de que las temperaturas muy altas en las calefacciones podrían provocar que la piel se reseque demasiado.

Para los niños con dermatitis atópica se recomienda mantener la piel bien hidratada, tomar baños con agua tibia, sacar al niño sin frotar la piel, usar prendas de algodón, además de vigilar que el niño tenga sus uñas limpias y cortas con el fin de evitar lesiones y la sobreinfección como consecuencia del rascado.

En caso de tener sospechas sobre dermatitis atópica lo mejor es llevar al niño con el especialista de forma inmediata para realizarle un diagnóstico y en su caso aplicar un tratamiento para atacar la enfermedad y en invierno es muy necesario hacer mayor énfasis en los cuidados por la forma de reaccionar del padecimiento ante el frío.

 

Vía: Medicina 21