La dieta diaria de los niños es, por lo regular, rica en calcio. Después de todo, es un nutriente presente en muchos alimentos, como la leche, los frutos secos, las verduras y la soya.

Los niños pequeños y los bebés que no reciben suficiente calcio y vitamina D —que ayuda en la absorción del calcio— tienen un mayor riesgo de raquitismo. El raquitismo es una enfermedad de debilitamiento óseo que causa un crecimiento deficiente y, en ocasiones, dolor y debilidad muscular.

Durante la niñez, el cuerpo utiliza el calcio para fortalecer los huesos. Los adolescentes, especialmente las niñas, cuyas dietas no proporcionan los nutrientes para fortalecer los huesos a su máximo potencial, enfrentan mayor riesgo de desarrollar osteoporosis.

Cuando los niños reciben suficiente calcio, y realizan actividad física durante la infancia y la adolescencia, pueden comenzar su vida adulta con los huesos fuertes. Para una salud ósea óptima, el Instituto de Medicina (IOM) recomienda:

  • 1 a 3 años de edad – 700 miligramos de calcio al día.
  • 4 a 8 años de edad – 1,000 miligramos de calcio al día.
  • 9 a 18 años de edad – 1,300 miligramos de calcio al día.

Conoce más: Calcio en la dieta diaria: funciones y recomendaciones

Fuentes alimenticias

  • Hortalizas de hojas verdes como el brócoli y la col rizada.
  • Salmón y sardinas enlatadas.
  • Almendras
  • Nueces de Brasil.
  • Semillas de girasol.
  • Legumbres secas.
  • Leche y otros productos lácteos.

Recuerda que el calcio es uno de los minerales más importantes para el cuerpo humano, pues, además de ayudarte a tener una masa muscular saludable, interviene en el envío y recepción de señales nerviosas, así como en la contracción y relajación muscular, entre otras funciones.

Si consideras que tu hijo padece una deficiencia de calcio, visita a un experto en nutrición.

 

Vía: Kids Health/ Medline Plus