dolorEl dolor de pecho es uno de los tantos síntomas que provoca un infarto al miocardio; no obstante, no siempre se debe a una afección grave. ¿Cómo diferenciarlo?

Tan sólo en Estados Unidos, el dolor de pecho envía a más de siete millones de personas a la sala de emergencia —cada año—. La mitad de ellos son retenidos en urgencias para observación, exámenes o tratamiento. El problema es el costo y la incomodidad de una hospitalización, la cual no siempre es requerida.

Para Michael Weinstock, investigador en jefe y profesor de medicina de emergencia en la Universidad Estatal de Ohio, es necesario evaluar si los pacientes pueden ir a casa de manera segura.

Durante un estudio, en el que se analizaron datos de 11 mil personas con dolor de pecho, se descubrió que menos del 1% de los pacientes desarrollaba un ritmo cardíaco potencialmente mortal, o sufrió un ataque al corazón.

Así, el riesgo de problemas cardíacos ante un dolor de pecho fue bajo, pues otros factores, como análisis de sangre cardíacos, signos vitales y electrocardiogramas, se mostraban estables.

«Esta información muestra que una admisión al hospital de rutina no es la mejor estrategia para este grupo. Tendemos a hospitalizar a muchas personas con dolor de pecho por preocupación de estar pasando por alto un ataque al corazón o alguna otra irregularidad potencialmente mortal. Para mí, este (nuevo resultado) indica que podemos pensar más sobre lo que es mejor para el paciente a largo plazo», sostuvo.

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De acuerdo con el especialista, es fundamental la comunicación entre médico y paciente, con el fin de garantizar que los afectados conozcan los riesgos y beneficios de permanecer en el hospital.

Todo esto, sin descuidar la salud del enfermo, es decir, que la decisión sobre la hospitalización se tome después de realizar los exámenes necesarios.

Considera que todo síntoma responde a una señal del cuerpo. No tomes a la ligera ningún tipo de dolor. Acude con un especialista ante cualquier molestia y cuida tu vida.

 

Vía: Health Library