El jugo de sandía es una bebida nutritiva e hidratante, rica en electrolitos, magnesio y potasio, que pueden ayudar a mantener la hidratación y el rendimiento deportivo. Además, muchos de los nutrientes que el cuerpo necesita a diario, y que conforman una dieta equilibrada, se encuentran en el jugo de sandía. Concretamente, este jugo contiene vitamina A, vitamina C, luteína, folato y más.
A esto se suma que la L-citrulina, un aminoácido, también se encuentra en el jugo de sandía, el cual puede beneficiar la salud cardiovascular.
Según los expertos, la sandía contiene citrulina, que ha demostrado ayudar a controlar la presión arterial. De acuerdo con varias investigaciones, la L-citrulina también se ha relacionado con una mayor biodisponibilidad de óxido nítrico.
Cuando la biodisponibilidad de óxido nítrico disminuye, se puede tener un mayor riesgo de hipertensión arterial, aterosclerosis, resistencia a la insulina, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.
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Asimismo, otro aminoácido llamado L-arginina se encuentra en el jugo de sandía.
La L-arginina se ha asociado con ciertos beneficios para la salud, como la mejora del flujo sanguíneo y la posible reducción de la presión arterial.
Diversos estudios han demostrado que la L-arginina puede ser beneficiosa para personas con hipertensión, colesterol alto, enfermedades cardíacas, resistencia a la insulina y diabetes.
El jugo de sandía también contiene licopeno y betacaroteno, ambos antioxidantes, al igual que la vitamina C. Los antioxidantes promueven la salud cardiovascular y pueden prevenir o ralentizar algunos tipos de daño celular. Se ha demostrado que el licopeno ayuda a mejorar los lípidos en sangre y la presión arterial.
Fuente: Very Well Health