La insuficiencia cardíaca congestiva se produce cuando existe daño al corazón en donde este órgano ya no funciona con la eficacia que debería para bombear sangre por todo el cuerpo.
Si el corazón se debilita y no puede suministrar suficiente sangre a las células, puede provocar fatiga, dificultad para respirar e hinchazón.
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Los siguientes son posibles síntomas de insuficiencia cardíaca congestiva:
- Congestión en los pulmones: El líquido se acumula en dichos órganos y causa dificultad para respirar, incluso cuando una persona está descansando, y particularmente cuando se encuentra acostada. También puede ocasionar una tos seca y persistente.
- Retención de líquidos: Menos sangre llega a los riñones, lo que puede resultar en retención de líquidos y causar hinchazón de los tobillos, las piernas y el abdomen. También puede ocasionar aumento de peso.
- Fatiga y mareos: Una reducción en la cantidad de sangre que llega al cerebro y otros órganos puede causar debilidad, mareos y confusión.
- Latidos cardíacos irregulares y rápidos: El corazón puede bombear más rápido para tratar de contrarrestar el menor volumen de sangre que se bombea con cada contracción. También puede activar los receptores de estrés en el cuerpo, aumentando la liberación de hormonas del estrés. La insuficiencia cardíaca puede incrementar el riesgo de arritmias, que a su vez pueden causar estos síntomas.
Muchas otras condiciones pueden dar lugar a síntomas similares, por lo que es importante consultar a un médico. Las personas que han recibido un diagnóstico de insuficiencia cardíaca deben controlar sus síntomas cuidadosamente e informar inmediatamente a su médico sobre cualquier cambio repentino.
Fuente: Medical News Today
