De acuerdo con Dawne Gardner, coordinadora de prevención de lesiones en el Centro Integral de Lesiones Infantiles del Hospital Pediátrico de Cincinnati, EU, la seguridad en el autobús escolar es una de las principales cosas que los padres deben revisar con sus hijos antes de que inicien el nuevo año escolar.
«A medida que las familias comienzan a preparar a los niños para volver a la escuela, es importante que padres e hijos hablen juntos sobre la seguridad de los desplazamientos en el autobús escolar. Esto ayudará a garantizar un inicio seguro y agradable del año escolar para todos«, aseguró la experta en comunicado de prensa.
Según una investigación reciente, los niños sufren muchas lesiones cuando suben o bajan de un autobús escolar.
Hay un punto ciego que se extiende en la parte frontal del autobús, de poco más de tres metros, que obstruye la vista del conductor. Con frecuencia, los niños no están conscientes de dicho punto ciego, y podrían creer erróneamente que el conductor del autobús puede verlos cuando no es así, alertó Gardner.
Los especialistas aconsejan enseñar a los niños a evitar la «zona de peligro» del autobús escolar al permanecer a 3 metros de distancia de la parte delantera o trasera del autobús, lo que permite que el conductor pueda observarlos oportunamente.
Gardner sugirió que los niños deben llegar a la parada del autobús escolar por lo menos cinco minutos antes de la llegada anticipada. Lo anterior evitará que deban correr por la calle para subir al autobús cuando llegue, o que corran detrás del mismo si ya ha dejado la parada.
Asimismo, advirtió que los menores deben pararse a una distancia de al menos tres pasos gigantes del borde de la acera cuando el autobús esté próximo a llegar, y nunca moverse hacia el vehículo hasta que se encuentre en alto total y el conductor haya abierto la puerta.
Añadió que los padres deben decir a los niños que eviten los juegos y bromas mientras esperan al autobús.
Es imperativo que los niños utilicen el pasamanos mientras suben al transporte. Si a un niño se le cae algún objeto, debe informar al conductor y asegurarse de que éste pueda verlo antes de recoger el artículo que se cayó.
Los padres también deben enseñar a sus menores a verificar que las correas de sus mochilas, las agujetas, las bufandas y la ropa suelta no se queden atoradas en el pasamanos, la puerta o los asientos del autobús. Otra cosa que deben enseñarles es a mantener los pasillos del autobús libres de mochilas o libros; a nunca empujar a otros compañeros; a nunca lanzar objetos fuera o dentro del autobús, y a permanecer siempre sentados mirando hacia adelante durante el trayecto a la escuela.
Los niños deben permanecer en su asiento hasta que el autobús se detenga por completo, y deben usar los pasamanos para salir del mismo. Si un niño debe cruzar la calle tras salir del autobús, debe dar cinco pasos gigantes desde la parte frontal del autobús, tener contacto visual con el conductor, y comenzar a cruzar cuando el chofer le indique que es seguro hacerlo, enfatizó Gardner.
Todos los padres deben asegurarse de que sus hijos miren hacia la izquierda, hacia la derecha y de nuevo hacia la izquierda antes de cruzar la calle, agregó.
Vía: Health Library
