Los adolescentes y los adultos pueden aprender a solucionar problemas conversando. Es normal que a los jóvenes les parezca extraño hablar de sexo con sus padres. Pero, aunque sea difícil de creer, es aún más difícil para los padres empezar la conversación.

64HablarSexoPadres

Para entablar una conversación con tus padres sobre estos temas en necesario que alguien dé el primer paso. Por tanto, es conveniente que seas tú quien lo dé, recuerda que si sólo hablas de temas difíciles -como el sexo- con tus amigos, puede ser que no recibas la información correcta. Intenta hablar con tus padres para comenzar con el pie derecho esta etapa.

Hablar de sexualidad no es hablar sólo de sexo. Es hablar del estilo de vida de una persona, según el sexo al que pertenece.

En un adolescente, por ejemplo, es hablar del estilo de vida que le corresponde según su género, que incluye la forma como se comporta en sociedad, como se viste, las expectativas que la sociedad tiene de él o ella, la participación social en su grupo de amigos, la conquista, el papel que cumple en una relación sentimental, y por supuesto del papel sexual que va a cumplir en una relación. Por ello, la sexualidad es mucho más que la vida coital de una persona.

Expectativas de los padres
Una vez llegada la adolescencia, los padres tienen la ilusión de que sus hijos les cuenten cuando vayan a tomar la decisión de iniciar su vida sexual activa, que les consulten, y hasta que les pidan autorización.

Uno de los más grandes esfuerzos en la crianza es que en esos espacios de diálogo inicial, los padres puedan plantearles a sus hijos todas las estrategias para que inicien su vida sexual cuando lo consideren pertinente, pero dejándoles claro que ésta es una decisión que requiere de planeación.

Lo más importante al momento de tomar la decisión es que el hijo crea o sepa que tiene control sobre el tiempo y la oportunidad para iniciar su vida sexual.

Mantén abiertos los canales de comunicación
La mejor herramienta que puedes utilizar para comunicarte con tus padres -o cualquier otro adulto- es seguir hablando con ellos, no importa sobre qué. Las relaciones importantes dependen en gran medida del hecho de mantener abiertos los canales de comunicación (piensa en tus mejores amigos y en cuánto hablas con ellos).

Intenta hablar con tus padres sobre las cosas cotidianas como una forma de mantener la conexión. Esto no significa que se lo tengas que contar absolutamente todo. En lugar de ello, desplaza el centro de atención hacia ellos para cambiar de tercio: pregúntales cómo les ha ido el día, como suelen hacer ellos contigo.

Tus padres sólo son seres humanos, y se pueden ofender cuando alguien cuestiona sus puntos de vista, incluso pueden tomar los desacuerdos de sus hijos adolescentes como algo personal. Utilizar un lenguaje y un comportamiento respetuoso en las interacciones cotidianas es muy importante. Resiste a la tentación de acudir al sarcasmo, los gritos, los insultos o el desprecio, y tendrás más probabilidades de conseguir lo que deseas.